Decir que este blog nació hace doce meses no es cierto. Han existido otras Sombras de Grumm; y este último formato, parece que el definitivo, se creó hace tres años, en el verano del 2006. Desde entonces ha crecido, se ha expandido, se ha hecho rico en contenidos y ha visto pasar muchas guerras, muchas discusiones y, sobre todo, muchos buenos momentos.
Pero hace un año, justo por estas fechas, asumí un compromiso: una entrada por día. Obviamente, eso ha sido imposible. Estar al pie del cañón los 365 días del año es insostenible. Pero ahora miro el histórico de mensajes, veo doce meses, veo 384 entradas (con esta 385) y pienso: pues no ha estado mal la cosa, joé. Cuando decidí crear un blog dinámico, tomé como referencia el mejor blog de género: Crisei, del maestro Rafael Marín. Obviamente, estar a la altura de este genio es imposible. Rafa ya es muy mayor y yo soy muy joven, y su sabiduría se cuenta en kilates de oro puro. No obstante, también debo decir que, con diferencia, Crisei ha sido el blog más amable con este modesto espacio, pues al día las visitas que llegan desde la bahía de Cádiz son innumerables, por lo tanto también pienso que algo habré hecho bien y que mucho le debo a ese blog padre llamado Crisei.
Como imitar al maestro Marín es imposible y realizar algo que ya está hecho no sirve pa’na, decidí darle a la Sombra de Grumm mi propio saborcillo, el soborcillo friki de David Mateo. Reducir las entradas sesudas y hablar de mis cosas. Y cuando digo mis cosas no sólo me refiero a mis libros (que también), me refiero al gusto por una cultura friki (los modernos la llaman contracultura o géneros undergrounds… yo lo llamo las cosas que me divierten desde pequeño), mi visión de la literatura, el pulso de las noticias que nos rodean y, sobre todo, mi vida.
Probablemente este haya sido uno de los años más jodidos de los últimos tiempos. Yolanda —la persona que más quiero— lo ha pasado muy mal e, inevitablemente, yo lo he pasado mal. Pero tampoco quería reflejar todo ese mal rollo en el blog, porque no sería justo. Ni tampoco creo que hoy sea justo que a todos los fieles a la Sombra les tuerza el día con pensamientos que no vienen a cuento y son muy personales. Pero quiero que sepáis que en muchos momentos, en los peores momentos del año, este blog ha sido un apoyo grandísimo y os debo un abrazo fortisísisisisimo. Quiero agradecer a todos los lectores habituales de la Sombra de Grumm vuestra participación (más activa o más pasiva), a todos los que me habéis mandado emails comentándome cosas, a las webs y administradores que se han hecho eco de cualquier parida que haya salido de esta grotesca mente, a los blogs que me han enlazado en su blogosfera, a los editores y autores que han confiado en este blog para promocionar su obra… en definitiva, a todos los que han puesto su granito de arena en este año tan complicado.
¿Y en el 2009 qué?
Pues chico, ni me ha salido la lotería, ni tengo perspectivas de que cualquiera de mis libros se convierta en «La sombra del viento» y sigue apeteciéndome leer contracultura, cultura underground o culturilla friki… llámenlo como quieran. Así que voy a seguir escribiendo en el blog. Si les apetece acompañarme, la puerta esta abierta las veinticuatro horas.
Por otro lado, he dejado de coordinar Historias Asombrosas ya que el trabajo en colegios e institutos aumenta, así que me va a tocar echar más horas con los niños. En breve comentaré más cosas relacionadas con HA en este blog, pero no os preocupéis que, hasta donde yo sé, la revista va a seguir funcionando normalmente. También hay proyectillos culturales muy importantes por ahí que espero que salgan adelante y deparen buenos momentos en este blog. Pero, como decía unos cuantos párrafos más arriba, en estos tiempos de crisis asegurar algo es una kamikazada.
365 días – 385 entradas.
Un bonito ejercicio literario, que diría mi amigo Marín.
No me atrevo a poner ningún nombre porque seguro que me dejaría a alguien. Pero tú que estás al otro lado de la pantalla (tú, sí tú) a ti te lo agradezco todo. Tú has sido el motor que ha movido esta sombra, por encima de premios, reconocimientos y palmadas en el hombro.
Y no me enrollo más que luego Jorge Ruíz Morales me riñe porque hago las entradas demasiado largas… y juro por Jesusito de mi vida, eres niño como yo, por eso te quiero tanto y te doy mi corazón, que esa no es mi intención.
Gracias por estar conmigo en el 2008 y que el 2009 sea mejor para todos.
¡¡Sois cojonudamente rebuenos, hostia ya!!
Pero hace un año, justo por estas fechas, asumí un compromiso: una entrada por día. Obviamente, eso ha sido imposible. Estar al pie del cañón los 365 días del año es insostenible. Pero ahora miro el histórico de mensajes, veo doce meses, veo 384 entradas (con esta 385) y pienso: pues no ha estado mal la cosa, joé. Cuando decidí crear un blog dinámico, tomé como referencia el mejor blog de género: Crisei, del maestro Rafael Marín. Obviamente, estar a la altura de este genio es imposible. Rafa ya es muy mayor y yo soy muy joven, y su sabiduría se cuenta en kilates de oro puro. No obstante, también debo decir que, con diferencia, Crisei ha sido el blog más amable con este modesto espacio, pues al día las visitas que llegan desde la bahía de Cádiz son innumerables, por lo tanto también pienso que algo habré hecho bien y que mucho le debo a ese blog padre llamado Crisei.
Como imitar al maestro Marín es imposible y realizar algo que ya está hecho no sirve pa’na, decidí darle a la Sombra de Grumm mi propio saborcillo, el soborcillo friki de David Mateo. Reducir las entradas sesudas y hablar de mis cosas. Y cuando digo mis cosas no sólo me refiero a mis libros (que también), me refiero al gusto por una cultura friki (los modernos la llaman contracultura o géneros undergrounds… yo lo llamo las cosas que me divierten desde pequeño), mi visión de la literatura, el pulso de las noticias que nos rodean y, sobre todo, mi vida.
Probablemente este haya sido uno de los años más jodidos de los últimos tiempos. Yolanda —la persona que más quiero— lo ha pasado muy mal e, inevitablemente, yo lo he pasado mal. Pero tampoco quería reflejar todo ese mal rollo en el blog, porque no sería justo. Ni tampoco creo que hoy sea justo que a todos los fieles a la Sombra les tuerza el día con pensamientos que no vienen a cuento y son muy personales. Pero quiero que sepáis que en muchos momentos, en los peores momentos del año, este blog ha sido un apoyo grandísimo y os debo un abrazo fortisísisisisimo. Quiero agradecer a todos los lectores habituales de la Sombra de Grumm vuestra participación (más activa o más pasiva), a todos los que me habéis mandado emails comentándome cosas, a las webs y administradores que se han hecho eco de cualquier parida que haya salido de esta grotesca mente, a los blogs que me han enlazado en su blogosfera, a los editores y autores que han confiado en este blog para promocionar su obra… en definitiva, a todos los que han puesto su granito de arena en este año tan complicado.
¿Y en el 2009 qué?
Pues chico, ni me ha salido la lotería, ni tengo perspectivas de que cualquiera de mis libros se convierta en «La sombra del viento» y sigue apeteciéndome leer contracultura, cultura underground o culturilla friki… llámenlo como quieran. Así que voy a seguir escribiendo en el blog. Si les apetece acompañarme, la puerta esta abierta las veinticuatro horas.
Por otro lado, he dejado de coordinar Historias Asombrosas ya que el trabajo en colegios e institutos aumenta, así que me va a tocar echar más horas con los niños. En breve comentaré más cosas relacionadas con HA en este blog, pero no os preocupéis que, hasta donde yo sé, la revista va a seguir funcionando normalmente. También hay proyectillos culturales muy importantes por ahí que espero que salgan adelante y deparen buenos momentos en este blog. Pero, como decía unos cuantos párrafos más arriba, en estos tiempos de crisis asegurar algo es una kamikazada.
365 días – 385 entradas.
Un bonito ejercicio literario, que diría mi amigo Marín.
No me atrevo a poner ningún nombre porque seguro que me dejaría a alguien. Pero tú que estás al otro lado de la pantalla (tú, sí tú) a ti te lo agradezco todo. Tú has sido el motor que ha movido esta sombra, por encima de premios, reconocimientos y palmadas en el hombro.
Y no me enrollo más que luego Jorge Ruíz Morales me riñe porque hago las entradas demasiado largas… y juro por Jesusito de mi vida, eres niño como yo, por eso te quiero tanto y te doy mi corazón, que esa no es mi intención.
Gracias por estar conmigo en el 2008 y que el 2009 sea mejor para todos.
¡¡Sois cojonudamente rebuenos, hostia ya!!
¡¡Y despedimos el año con una bonita canción lésbica que seguro les alegrará la vista!!